miércoles, 18 de abril de 2012

LA TIERRA DE LAS CUEVAS PINTADAS

Ficha Técnica
Título: LA TIERRA DE LAS CUEVAS PINTADAS
Autor: JEAN M. AUEL
Editorial:  MAEVA EDICIONES
Páginas: 794
ISBN: 84-15120-10-0
Género: Novela Histórica

Esta novela es la sexta y última de una saga ambientada en la prehistoria, Los hijos de la tierra,  que se inició en 1980 con la novela El clan del oso cavernario.  Narra la historia de Ayla, una mujer cromañón que vive durante el paleolítico, a mediados de la glaciación de Würm. Su autora ha dedicado gran parte de su vida al estudio de esta época y a la realización de esta obra y eso se nota, y mucho. En cada página nos da una información exhaustiva sobre este periodo y convierte la vida de esta joven en un pretexto para volcar ingentes cantidades de conocimientos sobre el inicio de la humanidad y los descubrimientos realizados por los primeros pobladores de Europa. 

La saga se inicia a orillas del mar negro, se desarrolla en un viaje a lo largo de Europa, de este a oeste, y finaliza con la protagonista afincada en el suroeste de Francia.  En este sexto volumen se nos describe esta zona con detalle, dándonos una idea de cómo sería en aquella época tan lejana y tan distinta. Y sobre todo, se nos brinda un recorrido de alto valor histórico por las principales cuevas ricas en pinturas rupestres, como el nombre del volumen ya nos hace sospechar. Aclamada por la crítica y los expertos en el tema como un fiel reflejo de aquellos años perdidos, no podemos negar su valor como trabajo de divulgación histórica.


A nivel literario, sin embargo, esta novela deja mucho que desear, por lo menos en mi modesta opinión. Argumentalmente, la historia que cuenta se puede narrar perfectamente en las primeras 200 de las  casi 800 que tiene el libro. Y creo que aún le sobraría. El resto son descripciones exhaustivas de las cuevas pintadas y algo de usos y costumbres, como conocimientos de plantas medicinales, cestería, tallado de pedernal, pero tampoco aporta nada nuevo que no haya descrito en las anteriores. Si queremos información histórica sobre el tema es mucho más útil coger cualquier monografía sobre el tema que tener que cribar algo de información entre tanta paja.

Uno de los mayores lastres de la novela es que contiene un exceso de relatos amplios y muchas veces repetitivos de cosas narradas en las cinco primeras entregas. Esto se hace realmente pesado para alguien que ya ha leído los libros anteriores. Y si se piensa que alguien que no los ha leído o no los recuerda bien  puede leer esta novela,  sería mucho más útil un breve resumen de unas cuantas páginas al principio narrando los hechos anteriores que ir explicando sobre la marcha todo lo ocurrido en los cinco primeros volúmenes.

Volviendo al tema del argumento, las cuatro cosas que en realidad pasan, no tienen importancia, no tienen valor como historia. En realidad no pasa nada. Es un mero hilo conductor que sirve de pretexto para exponer los conocimientos que sobre la época posee la autora. Y se hace francamente aburrida.

Los personajes aparecen planos, meros dibujos de lo que fueron. No tienen carisma ni relevancia. Los problemas y los conflictos que surgen se desdibujan en una narración bastante falta de emoción.

Respecto al estilo literario, se ve un deterioro importante. Lo que en los primeros libros se veía como un estilo ágil, dinámico y directo, aquí se convierte en algo monótono y aburrido. Hasta las escenas de sexo (dos o tres en toda la novela) son narradas como algo anodino y soso, sin ningún tipo de complicidad ni ilusión.

La sensación que tengo al finalizarla es  que se ha terminado la saga porque había que terminarla de alguna forma, con una historia sin interés, y muchísimo relleno de documentación y de repeticiones para justificar un gran lanzamiento a nivel mundial de algo que considero bastante prescindible.

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