sábado, 23 de noviembre de 2013

LA HUELLA BLANCA, de Ana B. Nieto






Con este libro me he saltado a la torera una de mis normas: no aceptar novelas cedidas por editoriales ni por autores para reseñar. No lo hago porque lo primero que me exijo en este campo es honestidad, primero por que creo que el autor se lo merece, y segundo,  yo también. Soy sincera en mis opiniones, pero las opiniones poco favorables sobre lo que uno ha hecho y otros, a veces, han alabado, no siempre son bien recibidas y la gente se suele molestar. No tengo tiempo ni ganas de conflictos, por lo que solo reseño lo que me apetece y cuando me apetece.


Pero hace unas semanas, no muchas, recibí un correo. Era una joven autora que me felicitaba por la vuelta de la actividad al blog y me decía que hacía tiempo que me seguía. Comentaba que le interesaba mi trabajo porque veía que teníamos gustos comunes, lecturas afines,  y quería que le diera mi opinión sobre su novela, tanto como experta en literatura como conocedora de la mitología celta. El tono tan educado, elegante y cortés, además de la obra en sí (el periodo histórico y la cultura que trata me fascinan), me sedujeron. Decidí hacer una excepción, y le avisé de que, cómo no, mi reseña iba a ser totalmente sincera. Si su novela tenía deficiencias iba a señalarlas, al igual que las cosas positivas que encontrara.

Cuando poco después recibí el paquete, quedé totalmente enamorada de la delicadeza de los detalles que acompañaban al libro: el envoltorio con adornos de hiedra, un cordel de cuyo nudo pendía una triqueta, un colgante en forma de trísquel, una pequeña libreta de notas con la tapa grabada con el nombre de la novela, una carta, y el libro, en tapa dura con sobrecubierta publicado por Ediciones B.


Pero todos estos detalles no han influido en mí para nada a la hora de dar mi opinión sobre la primera obra de esta joven autora. Aquí está y espero que os ayude a decidiros si tenéis dudas sobre si leer o no el libro.

RESEÑA

 DATOS TÉCNICOS
•     Título: La huella blanca
•     Editorial: Ediciones B.
•     Nº de Páginas: 512
•     Autor: Ana B. Nieto
•     Idioma original: castellano
•     Año de publicación: 2013
•     ISBN: 978-84-666-5303-9


     SINOPSIS
«Cuando Bróenán decide llevarse a Ciarán, el último niño de una tribu enemiga, quebranta con ello todas las normas humanas y divinas de su pueblo.
Este «niño robado» alcanzará la adolescencia ignorando sus orígenes y esperando el momento de casarse con Olwen, su amor desde la infancia. Cuando el secreto por fin se revela, marchará al exilio como pirata y capturará al muchacho que un día será san Patricio.
En su empeño por estar juntos, sin embargo, Ciarán y Olwen desafiarán a sus tribus, sus dioses y sus destinos, en una aventura que los llevará hasta las islas de Arán, en los confines del mundo.
Una novela sobre el canto del cisne de un mundo antiguo, dominado por las diosas madres, y su difícil encuentro con el cristianismo y el Medievo.»



     MI OPINIÓN: 
Esta novela me ha causado muy grata impresión, debido sobre todo a la alta calidad literaria de su autora. Su prosa cuidada y culta y su estilo, en ocasiones poético, hacen que su lectura sea un ejercicio literario de lo más agradable.

 Se trata de una novela histórica ambientada en la Irlanda del siglo V. Aunque trata sobre la relación entre dos jóvenes, no podemos decir que se trate de una novela romántica tal y como se entiende hoy día, sino más bien de la historia, sobre todo, de un hombre que vivió en esa época, su vida, sus anhelos y la búsqueda de su identidad. Esto la convierte en una obra más al uso de los grandes clásicos de aventuras que de las obras históricas propiamente dichas, más centradas en narrar un hecho histórico señalado.

La temática principal de la obra es el amor, y cómo el fracaso de este puede llevar a decisiones erróneas que cambien la vida y dominen el destino de una persona. Otro gran tema es la cristianización de la isla, que está todo el tiempo presente, sobre todo desde su punto central de inflexión. Pero es un tema que si bien está latente, no acaba de verse y comprenderse en profundidad, y es tratado de una forma muy superficial. El uso del narrador omnisciente, oportuno y desarrollado de una forma fluida, da mayor flexibilidad y permite una mayor facilidad a la hora de narrar las vivencias de los hombres y mujeres que pueblan sus páginas.

Su principal protagonista es Ciarán, un joven adoptado por el jefe/rey de la zona, rebelde y enamorado desde la infancia de Olwen, una de las jóvenes de la aldea. Este joven está muy bien dibujado, muy bien definido como persona, pero su comportamiento adolescente no está bien explicado, no se le ven motivos suficientes para actuar como lo hace.

El otro principal protagonista es Olwen, la niña de la que se enamora y con la que se crea el conflicto sentimental. Este personaje queda desdibujado, un tanto plano, sin que se le llegue a conocer en profundidad ni sus sentimientos ni sus motivaciones. Lo intuimos por lo que nos dice el narrador, pero no por lo que nos cuenta ella, quedando así aislada del lector, como ajena a la historia.

El resto son secundarios y, como tales, no están bien dibujados. Quedan un poco al margen, no hay ninguno que te haga empatizar con él. Quizá sea esta la mayor pega que puedo ponerle a la novela, ya que a pesar de ello, la autora consigue alejarse bien del maniqueísmo, y sus personajes, a pesar del poco volumen que alcanzan, tienen matices variados y todos resultan muy creíbles, coherentes y no hay situaciones que nos rechinen.

Los diálogos son adecuados al tipo de narración y ni resultan excesivos ni escasos. Quizá la carencia de agudeza o de mayor presencia de Olwen en ellos sea lo que le da esa mayor sensación de lejanía con el lector.

Respecto a la técnica literaria, la autora la domina muy bien. Nos encontramos aquí con una prosa rica y cultivada, en algunos fragmentos incluso poética. Y a pesar de ello podemos destacar la fluidez y la belleza del estilo que hace que esta novela se lea con facilidad y con mucho agrado. Podemos decir que este es uno de los puntos más fuertes de esta autora novel, muy llamativo y para el lector que aprecia la buena literatura, altamente atractivo.

Así mismo, la coherencia interna de la obra, la estructura y el ritmo llevan al lector casi en volandas por las páginas. Resulta una obra muy bien estructurada, bien urdida, sin incoherencias. La tensión se mantiene a lo largo de toda la novela hasta acabar en un clímax final que culmina en un pequeño epílogo.

Narrada en un registro educado sin ser en exceso culto, la autora domina con gran soltura un vocabulario muy amplio, mostrando una riqueza importante, sobre todo en vocablos propios de ese tiempo y  lugar, si bien abusa un poco de las notas al pie de página. Es de mencionar la fantástica ambientación que hace de la época, y aunque al principio hay un cierto toque docente, desaparece con rapidez, atrapa al lector y lo sumerge con habilidad en la sociedad rural de la Irlanda del siglo V. La autora no se vale de largas y densas descripciones ni de lugares ni de personas, lo que agiliza mucho la tarea del narrador omnisciente que domina toda la obra. A pesar de no ser descriptiva, consigue ofrecer una imagen nítida de paisajes y personajes a base de pinceladas.

En resumen, una preciosa y delicada novela histórica, de corte clásico, que evoca el género de aventuras del SXIX. Si bien tiene alguna carencia, sobre todo en cuanto al tratamiento de algunos personajes, podemos hablar de una buena novela que nos traslada con habilidad a una época y lugar muy diferentes a los que estamos acostumbrados. Más orientada a un público femenino que masculino, más adulto que juvenil, creo que hará las delicias de cualquier lector al que le guste la buena prosa y la recreación de ambientes pretéritos, aunque se sitúe alejada de grandes hechos históricos, batallas, y regios personajes.





viernes, 15 de noviembre de 2013

GRACIAS POR VENIR

Hace ya dos años y medio que empecé el blog. Lo hice con mucha ilusión, con muchas ganas de contar cosas a los demás sobre los dos temas que más me apasionan: las historias nuevas bien contadas y los mitos, esas historias viejas, contadas desde hace muchos años, una y mil veces y de mil maneras diferentes.

Desde entonces mi vida ha sufrido unos cambios muy profundos. Me quedé en el paro, he vuelto a trabajar (en cuatro puestos diferentes y a cada cual más estresante); los trabajos de corrección y lectura profesional son cada vez más, y más interesantes; he presentado libros, he asistido a jornadas y las he organizado; soy miembro de un grupo literario; he dado charlas, participado en mesas redondas; hasta he hecho mis pinitos en un medio en el que jamás pensé que estaría, como es la radio… Y, mientras tanto, he subido de vez en cuando algunas cosillas al blog: artículos sobre mitología, reseñas de libros que leo, algún que otro homenaje y algunas (pocas) historias personales. Han sido 42 las entradas que he escrito, casi a una por mes. Muy poco para la mayoría de los blogs, cierto. Pero hay que tener en cuenta que no me gusta mucho escribir. Lo mío es leer.

Y a pesar de que me cuesta escribir muchísimo más de lo que me cuesta leer cualquier mamotreto, hoy he decidido hacerlo porque es un día especial. Hoy el blog se hace mayor de edad, y regresa, tras un periodo de ausencia, con más fuerza que nunca, con la fuerza que me dan esas 100.000 visitas.

No lo entiendo, la verdad. No entiendo cómo con solo 42 entradas, un tanto extrañas ellas, escritas, no al amparo de la última publicación editorial de éxito, ni tras el último tema del momento, sino simplemente contando lo que me apetece, cuando me apetece, interesa a tanta gente.

A todos ellos, a esas 100.000 personas que se han asomado a esta ventanita, solo puedo decirles una cosa:





Y prometerles que seguiré en la misma línea. Eso sí, aumentando y mejorando poco a poco, porque toda esa gente que se asoma, que comenta las entradas y que cree que el mío es un blog digno de seguirse, lo merece. 


http://youtu.be/6YbEh_hT1Aw

domingo, 10 de noviembre de 2013

HADAS QUE MUERDEN, de Ana Martinez Castillo


Hace algún tiempo, unos dos años, una chica a la que no casi conocía me pidió en un foro si podía leer una historia que había escrito y darle mi opinión. Se trataba de un cuento, para público infantil, pero tenía miedo de que fuera muy oscuro, muy tétrico para niños.
Yo tengo dos hijos, pero reconozco que no están en lo alto de la campana de Gauss en lo que a normalidad se refiere, ya que el teleñeco favorito de uno de ellos era el Conde Vampiro y el del otro, Animal. Fanáticos de El Pequeño Vampiro, todo lo que fuera tétrico y oscuro les fascinaba desde pequeños. Yo creo que los niños sienten atracción por el mundo mágico y los seres oscuros les encantan. Somos nosotros los que les metemos miedos, pero eso forma parte de teorías psicológicas en las que no me voy a meter. Ellos ven como natural cosas que  a los adultos, ya condicionados, nos repelen. Como muestra, venga la anécdota que una amiga me contaba sobre cómo le había dictado su sobrino de tres años la carta a los Reyes Magos:
«—Quiero un tiburón grande con dientez muy grandez. Y un dinozaurio con dientez muy grandes. Y un león con dientez muy grandez. Y un bebé.
»—¿Para que quieres el bebé, Daniel?
»—Para que ze lo coman, tía, para que ze lo coman.»
Viendo ejemplos de cómo reaccionan ante lo oscuro y cómo esto les atrae, no creo que haya cuento tétrico que, bien contado, no les entusiasme. Le conté lo que pensaba, pero la escritora seguía teniendo serias dudas sobre si su historia funcionaría.
Se daba la circunstancia de que mi hermana es profesora de primaria, y me ofrecí a que lo leyera y se lo enseñara a sus compañeros de trabajo, para recabar su opinión. Ana me lo envió, yo lo leí, lo disfruté y se lo pasé a los maestros. Cuando volví a hablar con la autora, le dije que había habido unanimidad. El cuento era muy bueno. Muy tétrico, sí, pero enganchaba y emocionaba desde el primer momento, sin quedar ni edulcorado ni en exceso sangriento.
Ahora me entero de que por fin va a ver la luz y va a ser publicado. Me alegro mucho por la autora, y también por todos esos niños que podrán leerlo y añadirlo a su imaginario, a su vida. Sé que esas Hadas que muerden les acompañarán siempre. Espero que esto solo sea el principio para esta estupenda escritora y que nos regale muchas más joyas como esta.
Tras esta introducción, y aunque no sea algo que se suele hacer, voy a publicar su reseña. Quiero que la tenga ya antes de salir al mercado.

Hadas que muerden

Autora: Ana Martínez Castillo 
Ilustraciones: Tania Coello
ISBN: 9788494133251
112 páginas
Rústica con solapas
Colección Liliput nº1
Novela infantil fantástica
Precio: 8,95€

Sinopsis:
Imagina pedir un deseo y que este se cumpla. Imagina además que tu deseo invoca a un hada, y que ese hada no es ni remotamente como imaginabas. Porque existen hadas negras, de naturaleza oscura, que habitan los bosques, que se alimentan de arañas, y que siempre, siempre, tienen hambre. Piénsalo muy bien antes de invocar a un hada. Porque puede que acuda a tu llamada y no tenga intención de marcharse jamás.

Mi opinión:

Es un cuento sencillo, bien hilado, bien estructurado, muy bien desarrollado, que mantiene el interés de la historia. Esta no peca en absoluto ni de moralinas ni de ese tono de superioridad que muchas veces se ve en los textos escritos por adultos para niños, a los que los consideran tontos.
Lectura agradable para todos los públicos, sus personajes son vivos y reales, extraordinariamente creíbles, uno de los puntos fuertes del cuento. Está contado con una técnica muy buena, con un gran dominio del lenguaje, del vocabulario, de la gramática y la ortografía. Poca corrección fue necesaria en la primera lectura, por no decir ninguna. Respecto a su estilo, sencillo y directo, no cae en la parquedad ni en la pobreza, a pesar de ser muy adecuado a la edad a la que va dirigido. Consigue no caer en una técnica excesivamente simplona y rasa, está muy bien equilibrado.
Tienen una estructura muy bien organizada. Se ve que está bien planificado y bien elaborado en una línea temporal. El relato se desarrolla de una forma óptima,  con una estructura clásica —presentación, nudo, desenlace—, armoniosa y bien desarrollada. Su ritmo ágil y ligero engancha y hace que se lea en un momento. Y por supuesto nos deja con ganas de más, pues su verosimilitud es mucha, no hay detalles que chirríen, consigue meterte de lleno en la historia y suspender nuestra incredulidad completamente.
Es, en suma, un precioso cuento que hará las delicias, sobre todo, de las pequeñas lectoras. Más orientado a las niñas que a los niños, puesto que su protagonista es una niña, y les resulta más fácil identificarse con ella, es un libro perfecto para regalar. Y si la niña no es lectora, gracias a cuentos como este puede acabar siéndolo. Es de esos libros que despiertan la afición por la lectura.

Seguiremos pendientes de esta nueva escritora, Ana Martínez Castillo.   
En su blog La hermana cruel podéis encontrar el primer capítulo para leerlo y ver el desarrollo, paso a paso de la portada. Espero que lo disfrutéis.